miércoles, 27 de mayo de 2009

Calipso

Si es que estás buscando un Calipso, esto tienes que hacer: toma un ritmo y sientelo un poco, muevete que muevete que muevete y canta una canción, tocando el tambor haz un Calipso naceer..

Si es que estás buscando un Calipso, esto tienes que hacer: toma un ritmo y sientelo un poco, muevete que muevete que muevete y canta una canción, tocando el tambor haz un Calipso naceer..


Si es que estás buscando un Calipso, esto tienes que hacer: toma un ritmo y sientelo un poco, muevete que muevete que muevete y canta una canción, tocando el tambor haz un Calipso naceer..



Si es que estás buscando un Calipso, esto tienes que hacer: toma un ritmo y sientelo un poco, muevete que muevete que muevete y canta una canción, tocando el tambor haz un Calipso naceer..



Si es que estás buscando un Calipso, esto tienes que hacer: toma un ritmo y sientelo un poco, muevete que muevete que muevete y canta una canción, tocando el tambor haz un Calipso naceer..

lunes, 25 de mayo de 2009

Utopías de un mundo mejor

¿Cuántas veces se nos ha cruzado por la cabeza que vivir otro momento de nuestras vidas sería mejor? ¿Cuántas condenadas veces creímos que escaparnos a un mundo utópico creado por nuestra propia imaginación sería la mejor 'solución' (entiéndase por eso palabra mal usada por nuestro conciente)? ¿Y cuántas otras hemos querido huir bien lejos?

Infinitas. Simplemente, innumerables... Y sé que es poco comprensible, pero sí, es de este modo como comienza la vida de él, queriendo irse. Se sentía capturado en un mundo que no era el suyo, bajo un techo ajeno y completamente adverso a lo que el siempre deseó. Se creó su propio mundo (mejor dicho, su submundo) al que huyó despavoridamente, intentando alcanzar su horizonte, creyendo que algún día finalmente esa línea que separa al mar del cielo se uniría en una sola, conformando su camino.

Utopía.

mirando hacia el horizonte, vemos como de repente, esa perfecta línea que divide el mar y el cielo se va difundiendo, se disuelve y se esfuma, haciéndose cada vez más pequeña y cada vez aún más aguda hasta finalmente, perderse en el horizonte..

lunes, 18 de mayo de 2009

Such a lonely day..

Soledad.

Vaga por las desérticas calles empapadas de un resbaladizo brillo que le empalagaba. Miró para allá, para aquí y por allí también, pasó sus ojos sobre mi sin percatarse de mi presencia. Corrió, saltó; no había nada que pudiera hacer. Me sonreí en silencio, acomodando mi sombrero para que me tapase media cara, dejando caer sin querer el cigarro que descansaba en mi oreja izquierda. Lo vio. Ahora si no tenía escapatoria; se acercaba el momento en el que saldría corriendo quien sabe a dónde, y solo iría a un nuevo escondite, para seguir riéndome en silencio de él.

Soledad nuevamente.

Entre malas palabras y pesadez me levanté colgado de una percha y caminé con pasos lentos y llenos de inseguridad... Sólo en mis sueños dejaba de sentir esa soledad, esa risa mal intencionada y ese desdén que me reducía a un niño irrelevante. Me hundía, por completo, solo en una nebulosa que me atrapaba y me abrazaba con firmeza.

No. No volvería a hacerlo. Cada vez que lo evaluaba me invadía un sentimiento de necesidad, de deseo... Pero tenía que domar mis instintos, reducirme a sólo imaginarlo. El placer que siento es indescriptible...

Decidí, finalmente, que era imposible. Sucumbí, sucumbí ante mis deseos instintivos. Pasé tres días y tres noches planeando aquel macabro 'plan'. No salí. No llamé a nadie...

Soledad.

Vaga por las desérticas calles empapadas de un resbaladizo brillo que le empalagaba. Miró para allá, para aquí y por allí también, pasó sus ojos sobre mi sin percatarse de mi presencia. Corrió, saltó; no había nada que pudiera hacer. Me sonreí en silencio, acomodando mi sombrero para que me tapase media cara, dejando caer sin querer el cigarro que descansaba en mi oreja izquierda. Lo v[...]

otra vez ese extraño sueño en el que me veía desde otra perspectiva. Soñaba despierto. No tenía cordura. Enloquecí, me volví un prisionero de mi propio ser y ya nada tenía sentido... Matar. Morir. Deseo..

Soledad. Soledad.. Soledad..

Soled...

(L)

Queda Prohibido

Queda prohibido
llorar sin aprender,
levantarte un día sin saber qué hacer,
tener miedo a tus recuerdos...

Queda prohibido no sonreir a los problemas,
no luchar por lo que quieres,
abandonarlo
todo por miedo,
no convertir en
realidad tus sueños...

Queda prohibido no intentar
comprender a las personas,
pensar que sus vidas
valen menos que la tuya,
no saber que
cada uno tiene su camino y su dicha...

Queda prohibido no crear tu historia,
no tener un momento para la gente que te necesita,
no comprender que lo que la vida te da,
también te lo quita...

Queda prohibido no buscar tu
felicidad,
no vivir tu vida con una actitud positiva,
no pensar en que podemos ser mejores,
no sentir que sin ti, este mundo no sería igual...

Pablo Neruda




un poema de Neruda que de veras vale la pena leer.

martes, 12 de mayo de 2009

First time

It is amazing how much you can learn from a group of boys by seeing them playing. Last year it was the first time I worked at an Institution educating children from three to fifteen years old, and every Saturday I had to organize an activity according to their ages and about a particular topic. They were divided in five groups, and for each of them there were two leaders doing the different activities. The group I led was the eldest one.

At first, I felt truly scared because of their ages. It is said that working witht them is as difficult as keeping a two-year-old baby quiet. Besides, my workmate wasn't really the one who I had the best relationship with, what is more, I don't remember ever having talked to him before that (without mentioning that now he is one of my best friends).

However, it turned out to be a great year, not to say challenging most of all because we were able to discuss some topics we couldn't talk about with the other groups.

Now, going straight to the first Saturday, it was about a very delicate theme: the military coup of 1976. We decided to cover the walls of a small office with pictures of those years, little pieces of writing and we also played on some music related to it. Not only did we hung the pictures up, but we also drew on the floor a big unknown silhouette and their names were changed for 205 and 370.

It all went perfect, they learnt everything we intended them to, and they also seemed very interested and listened very carefully to everything we read and said.

Finally, all my fears vanished without trace and I was ready to enjoy the meetings. I ended up wishing everyday to be Saturday.

sábado, 9 de mayo de 2009

Ensayo sobre la Maldad

La maldad es una forma de actuar que siempre estuvo presente en la humanidad, desde los comienzos de todo, como el estúpido pero sin embargo claro ejemplo de la amistosa serpiente incitando a Eva (y luego, ésta haciendo lo mismo con Adán) a comer el fruto prohibido. Es un acto involuntario (y, obviamente, voluntario también -de más está decirlo-) que las personas tienen por el mísero instinto de la búsqueda de placer instantáneo y a costa de todo, y cuando digo T-O-D-O, es simplemente todo... Y todos. Sin tener en cuenta ni la causa ni la posible consecuencia, el ser humano actúa de esta manera, mostrando así su 'natural egoísmo' y amor propio (por no llamarlo narcisismo o, mejor dicho, indiferencia por el bienestar y felicidad del prójimo).

Desde la niñez las personas se comportan con malicia, hiriendo a los demás niños queriendo o sin quererlo. Así como también están aquellos que por ingenuidad pasan a ser víctimas de la ya mencionada agresión. Del mismo modo, encontramos también a los mediadores entre la víctima y el victimario, haciendo que la falta de tacto del último se materialice, es decir se sienta, y que el primero tenga contención. Esa es, con claridad, la clase de persona ideal para un mundo lleno de paz, sin heridos ni agresores.

En la otra punta del abanico se encuentran quienes, con el transcurso de los años y con éstos los buenos y malos momentos de su vida, optan por cambiar de raíz su política de vida. Viendo y considerando que por buenos van a pasar por 'buenudos' (más claro, tontos) y creyéndose aún más vivos por dicha selección, eligen cambiar, se dan vuelta como una tortilla y comienzan a actuar con la maldad como mejor amiga y siendo los victimarios, se sienten, por primera vez, 'superiores'. Hoy son los verdaderos protagonistas de la fimlación, actuando por las desquiciadas ganas de tenerlo todo... y rápido! No tienen el mínimo interés en sentir la satisfacción que genera el haber logrado algo por el esfuerzo y el mérito, cuanto más de arriba, ¡mejor! No tenía más que estirar sus cinco dedos y tomar c u a l q u i e r cosa que pudiera tener valor monetario, y tan rápido como lo vio ¡ZAS! Desapareció sin dejar rastro, desvaneciéndose al poco tiempo, siendo ahora tan sólo unos pocos billetes que nunca podrían llevar el vacío emocional que había quedado por siempre abierto en el corazón del primer y único (legitimo, claro) propietario del objeto en cuestión.

Sin embargo, esto no ha terminado acá, es más, me atrevo a decir que recién ha comenzado. En otro portafolio, diferente de cabo a rabo, se encuentran los que se empeñan en hacer el mal a grandes escalas. Hay claros ejemplos de este tipo de personas (la II guerra mundial, la Dictadura Militarm el atentado contra las Torres Gemelas, y podría quedarme nombrando muchos más) pero eso es algo que está fuera de nuestro alcance, o al menos fuera de aquél que nosotros queremos creer. Simplemente, no hacemos lo sificiente por hacerlo desaparecer, puesto que aquéllas personas que hicieron desastres en la sociedad, como lo mencionado con anterioridad, son personas, tal como cualquiera de nosotros, en lo único en lo que diferimos es en la visión que tenemos de las cosas, en nuestra mentalidad.

'Con disimulo pero casi sin siquiera titubear lo hace, toma eso que no le pertenece, pidiendo sin decirlo un préstamo de por vida, haciendo que dicho objeto pase de mano en mano, a cambio del asqueroso dinero. Y no! Por supuesto que no, no se detuvo a pensar en el daño emocional que causaría por saciar su propia ambición...'

Crear. Armar. Organizar. Arreglar. CREAR.
Destruir. Desarmar. Desorganizar. Romper. Destruir...


¿Con qué necesidad el hombre necesita destruir todo aquello que el otro construyó para crear algo propio? ¿Por qué simplemente no se esfuerza (y se limita) en crear algo que sea nuevo desde su base, producto de su imaginación? He aquí en donde encuentro la gran bifurcación que hay en la humanidad: quienes son ávidos por crear y descubrir, y aquellos con afán de destruir. ¿Es que no podemos todos conformar la gran masa positiva? Aunque, si bien crear es positivo, a veces conlleva destruir para realizarlo satisfactoriamente, lo cual nos envuelve ahora en un enorme círculo vicioso en el cual la maldad por el egoísmo está a flor de piel...

domingo, 3 de mayo de 2009

Everybody's changing

Ding, dong... Ding dong. Y otra vez, como todas las tardes, el reloj de péndulo que enmarcaba la pared del living dio las cuatro. Comenzó a mecerse, como cada tarde, en su silla, para adelante y para atrás, para adelante y para atrás, en un incesante vaivén. Tomó las agujas de tejer, como de costumbre, para continuar con aquél interminable suéter anaranjado que venía posponiendo desde hacía ya más de dos años.

Entre suspiros, y observando la tenue luz que entraba por la ventana, sacó el ovillo de lana -casi sin usar- de una bolsa de cartón marrón oscuro. Yo empecé, como cada tarde, a jugar con él, pero ya nada era igual. Había algo en el aire de aquella tarde que ya no olía como antes.

Sus ojos a través de los vidrios de sus anteojos, redondos como dos lunas llenas, se veían cansados, diciendo que ya habían tenido suficiente, pero yo, que la conocía como el alba conoce al sol, supe distinguir que detrás de esa imagen de mujer cansada se encontraba una llama ardiente, que se encendía más y más cada vez que miraba la resolana que entraba a través de la ventana. Entre suspiros y lamentos continuó, ya sin ganas, el suéter que, de haber llegado a los 50, hubiera sido el regalo perfecto para su hijo menor, muerto hacía dos años. Cuando yo pensaba en esto, ella, al instante, quebraba en un mar de lágrimas, como si pudiera leer mi mente. Intentó comunicarse con su bisnieta, como cada tarde hacía varios años, pero, valga la redundancia, como cada tarde no se encontraba... Había salido, con las amigas... con el novio...

María solo estaba buscando una tarde distinta, una tarde de juegos, donde ella pudiera divertirse, como solía hacer cuando todavía vivía su hijo... Pero ya no... Era tarde para todo eso, incluso para ponerse a cocinar... Sus lagrimosos ojos me miraron una vez más, me acarició con ternura, como ella sola sabía hacer... Por un pequeño instante sentí que aquellas tardes volvían a ser normales. Pero al instante siguiente, suspiró una vez más, y mientras recostaba su cabeza con aquella flamante cabellera rubia me susurró 'ven, vamos a jugar...'. Y comenzó a lanzarme el anaranjado ovillo de lana. ¡Había vuelto! Estaba tan feliz que era imposible de entender...

Aquella noche dormimos juntos, me abrazaba con ternura... Me acariciaba con dulzura, como siempre...

Pero Dios maldiga los repentinos cambios... A la mañana siguiente María, MI María ya no respiraba, ya no tarareaba sus dulces melodías, ya no... Ya no vivía... Esa tarde sí que no fue igual. Me senté en su silla, con mi ovillo de lana, a llorarla como ella merecía... Y desde entonces, cada tarde que el péndulo anunciaba las cuatro, una lágrima negra se asomaba y un maullido la llenaba de tristeza...